Yo veo las religiones, politeistas o monoteistas, como una metáfora. Un código moral. Unas directrices que debemos seguir para poder vivir sin arrepentirnos de nada. Todas las religiones tienen cosas buenas y malas. Nosotros simplemente debemos decidir cual queremos creer. Alá, Jehova, Dios... no son más que sinonimos para referirnos a la misma idea. Un "algo" a lo que nos aferramos para no sentirnos solos. Algo que nos da fuerza en nuestros momentos de debilidad.
Las ideas son las mismas sin importar la distancia, ya sea en el espacio o en el tiempo. Paz, igualdad, etc. Todo creyente tiene el mismo objetivo. Ganarse un lugar al lado de su dios.
Muchos que tropiecen con este post por accidente me llamaran hereje. Pedirán mi cabeza. Pero en alguna parte de su interior reconocerán que tengo razón.
No soy ateo. Cuando era pequeño creía en el Dios cristiano. Ahora creo en "la idea de Dios". He leido la Biblia, y traducciónes de fragmentos de otros textos sagrados. Todos se reducen a la misma idea. Todos dicen lo mismo de diferente manera. Algunas religiones surgieron de otras.
No tiene sentido pelearnos por las creencias de unos y otros.
Al fin y al cabo, todos vamos al mismo sitio.
Toda vida conduce a la muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario